Hacía tiempo, mucho tiempo, que no se jugaba un partido en el Calderón a las 17 h. un domingo. Está bien el jugar a esa hora. Uno rememora buenos recuerdos. Tiene un sabor genuinamente tradicional. Además, qué carallo, si el partido es como el que se disputó ayer en el Calderón, pues es ideal de la muerte para despejarte de la resaca del finde, para comentar con tu colega qué tal ha ido todo, o, directamente, para aprovechar el solecito dominical para echarte una siestecita como Dios manda después de un buen papeo, viendo lo que había sobre el terreno de juego.
Porque ayer lo que se vió en el Calderón fue, por un lado, un equipo indolente al máximo, que fue el nuestro, frente a otro contemplativo a tope, como fueron los levantinos. Ni siquiera les motiva la supuesta superioridad numérica ante tu adversario (75 minutos once contra diez absolutamente para nada, y no es la primera vez que nos pasa esto). Pues qué bien, oyes.
Ardo en deseos de escuchar las declaraciones del Señor Ferrando esta semana, después de su sacada de pecho en la anterior. Es el problema de hacer esto, míster. Que cuando lo haces, te lo parten. Si tiene algo que decir, hágalo con la claridad de que dice que presume cuando habla. De verdades a medias está este club, desgraciadamente, plagado. Ándese con ojito, Señor Ferrando. Por cierto, varios interrogantes:
- Si el denunciante Sergi está ya recuperado, ¿No es más inteligente el ponerle a él de lateral, adelantar a Antonio López, y cambiar de banda a Gronkjaer? Debe de ser que no. Parece que lo más razonable es poner a Jorge Larena pegado en una banda, en la cual lleva demostrando durante toda la puta temporada la inutilidad que es jugando en dicha posición.
- ¿Por qué no esperó al descanso para reorganizar el equipo como Dios manda? Debe de ser que el objetivo principal que tiene el valenciano es hundir en la más absoluta miseria a Colsa.
- ¿En qué posición jugó Ibagaza (rematadamente mal, por cierto)? ¿Por qué se empeña siempre en sacar en largo el portero (demostrado científicamente que no nos llevamos ni uno solo de esos balones)? ¿Cree usted que Braulio hubiera fallado el tanto que mandó al limbo de manera alucinógena Salva?
De todas formas, si hay algo que caracteriza a este club es que, después de una gran alegría, siempre tiene que venir de forma consecutiva la gran cagada. Y porque el Levante pasó de todo, que si no ...
Por último, rogaría a los mercenarios que avisaran a los espectadores de cuando a los señoritos no les apetezca en exceso el jugar al fútbol. Así se evitarían muchas caras de gilipollas y disgustos innecesarios.
-- Un saludo.
Tomi. Frente Atlético. Sección Baramba.
SI EL ATLETI LO ES TODO, TODO ESTÁ JUSTIFICADO.
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